Tipos de conflictos laborales
- Servicios Jurídicos RFJ

- 11 abr
- 2 Min. de lectura

Cualquier espacio de interacción social acaba desembocando, tarde o temprano, en algún conato de enfrentamiento o discusión. Cuando ocurre dentro del trabajo hablamos de conflictos laborales.
Las rencillas acumuladas y la falta de comunicación (o el exceso de mala comunicación, si se prefiere) pueden acabar afectando negativamente al clima de trabajo.
Resolver correctamente los problemas laborales y los conflictos en el trabajo es una prioridad de los responsables de Recursos Humanos. La anticipación y la proactividad son las mejores armas para mantener un buen clima laboral y evitar que los profesionales desperdicien su energía en enfrentamientos totalmente estériles.
Examinadas las causas más comunes, veamos cuáles los tipos de conflictos laborales que se reproducen más fácilmente en las empresas:
· Interpersonales o intrapersonales: un porcentaje muy elevado de los conflictos tienen como protagonistas a varias personas. Otras veces, en cambio, las tensiones se dan dentro de un mismo trabajador.
· Intergrupales o intragrupales: como en el caso anterior, es posible que los problemas en la empresa se originen por el choque entre varios grupos de trabajadores o que los conflictos se produzcan dentro de un mismo equipo de trabajo.
· Desinformación o mala comunicación: los malentendidos son algo casi cotidiano en las empresas y no deberían desembocar en conflictos graves, aunque muchas veces sucede exactamente así.
· Problemas contingentes o aplazados los conflictos contingentes son relativamente comunes, pero tienden a solucionarse de manera casi automática. Los problemas aplazados, por el contrario, pueden hacerse crónicos y agravarse con el paso del tiempo.
· Conflictos soterrados o silenciados: es la situación que se da cuando algunos empleados están disgustados o enfadados con otros, pero estos no se han percatado de ello o no le han dado tanta importancia.





Comentarios